Pregunta 1: Jorge, hoy nos encontramos de nuevo en el Eje Cafetero en el Festival Convivencia Eje Rock. Este año se cumplen 30 años de la grabación de Verdún, y Neurosis ya casi cumple 40 años. Pensando en esta entrevista, hay diferentes preguntas que desde la Dirección Editorial de Revista Espektra hemos considerado formularte.

Tu historia y la historia de Neurosis siempre han sido referentes en el metal nacional, suramericano y en latitudes mucho más lejanas, en otros continentes. Hay diferentes cosas que me hacen reflexionar a la hora de hacerte esta entrevista; no obstante, hay un par de preguntas de carácter personal que deseo hacerte. Al igual que tú, también soy descendiente de inmigrantes europeos que vinieron a Colombia después de la Segunda Guerra Mundial. Mi abuelo combatió en aquella cruenta guerra y, junto a su joven esposa y dos hijos, llegó a Sudamérica en busca de un nuevo destino. Tal vez nunca creyeron que la barbarie vivida en los años de guerra en Europa se pudiese repetir en un país tropical y lejano como Colombia.

¿Ser descendiente de inmigrantes ha influido en tu obra? ¿Crees que ellos hubiesen podido prever que también Colombia libraría una serie de conflictos, uno tras otro, desde los años 50 hasta la actualidad?

Entrevista con: Jorge Mackenzie

Fotografía y preguntas: Bruno Sandstede

Respuesta 1: Si ha influido, no solamente es el hecho de que mi padre era escocés y mi abuelo estuvo en la segunda guerra mundial, sino que no crecí en Colombia, nací aquí en Cúcuta pero a los 5 años me llevaron a Madrid, España donde estudié en un colegio británico donde lógicamente se enseña historia universal. Luego a los 17 años me traen de nuevo a Colombia, un país totalmente nuevo para mi y extraño para mí. A los 12 años viajé por muchos países de Europa occidental empapándome de la cultura europea así que con este trasfondo de mis primeros años de vida creo que es lógico que esto haya tenido una influencia en algunas de mis composiciones, no todas, pues otras vienen desde el vivir en Colombia también. En cuanto al conflicto colombiano yo lo viví de primera mano ya que en 1989 me fui de voluntario al ejército, inicialmente estuve en la base aérea de Tolemaida donde hice el curso de Lancero el cual es el más duro del ejército colombiano y saqué el segundo puesto, luego me fui de voluntario a zona roja a las selvas del departamento del Putumayo durante 6 meses. Salí sub-teniente del ejército por mi desempeño durante el tiempo que permanecí ahí, en esos años 1989 y 1990 se vivieron hechos violentos en el país como el asesinato del precandidato presidencial Galán, el atentado al avión de Avianca y muchos más, fue una época que marcó al país durante muchos años. Esta parte de mi vida también ha influido en mi obra, mientras que bandas colombianas de esa época escribían sobre la violencia en Colombia yo había decidido vivirla en carne propia de manera voluntaria ya que no fui obligado a ninguna de esas situaciones, todo fue por voluntad propia por querer vivirlas y aportar algo a un país al que apenas había llegado hacía apenas dos años.

Pregunta 2: Siguiendo un poco la cronología de tu biografía, empezaste a tocar en Neurosis siendo muy joven, en compañía de músicos de la talla de Bullmetal. Con él y una alineación en la que también estaban Arley Cruz, Francisco Nieto y Carlos Márquez, lanzaron el primer demo de la banda titulado Más allá de la demencia en 1991, el cual justamente se encuentra ahora en reedición. Este trabajo, que se ha convertido en todo un culto del metal colombiano, plantea diferentes temáticas que van desde la guerra, con canciones como “Guerra Mortal”; pasando por temas relacionados con el ocultismo, como “Invencible”; hasta otros de crítica religiosa y social, como “Maldita moral”.

Aparte de la gran importancia de reeditar un trabajo clásico del metal nacional, ¿qué otro aporte crees que brinda Más allá de la demencia a los tiempos convulsos que sigue viviendo el país?

Respuesta 2: Los temas del “Más Allá de la Demencia” los empezamos a componer desde 1987 que fue el año en que la banda se formó. Para mi la escritura en el metal y las letras siempre han sido importantes, no las veo como un relleno como se suele ver, especialmente en estos tiempos tan vacíos, sino que me parecen un elemento valioso para fomentar el pensamiento y el análisis. Cuando yo tenía 17 años y empecé a escribir esas letras quería darle un sentido a la música a través de la visión de mi vida hasta ese entonces, vivencias personales que llegaban al fondo de mi alma, yo en vez de estar pensando en cosas banales y desperdiciando mi tiempo me dediqué al cuestionamiento de mi existencia en este planeta. Digamos que de ahí surgieron los diferentes temas que toco en las letras de ese trabajo. Además, se dio una buena conexión con Francisco con la música que él componía en ese entonces. Ya para 1991 y cuando yo ya había salido del ejército se dio la situación de poder contar con Bull Metal para grabar las baterías de las canciones, pero el trabajo ya estaba hecho cuando el ingresó y las canciones terminadas, nunca tocamos con Bull Metal en vivo.

Pregunta 3: En tu Facebook sueles contar anécdotas muy interesantes. Una de ellas fue una foto con Joe Arroyo, con quien coincidiste en un avión de Quito a Colombia en 2007. Contabas que la primera vez que lo escuchaste fue en el ejército, en 1989, cuando un cabo de apellido Agudelo despertaba a tu escuadra con la canción “El preso”, la cual —narrabas— encajaba a la perfección con lo que vivías en aquel momento como militar en el Putumayo.

¿Cómo influyó esa experiencia militar en tu trabajo posterior en Neurosis?

Respuesta 3: En algunas canciones como “Military Sacrifice” que está en “Verdun 1916” e “Hijo de la Patria” que está en “Subversivos Espirituales” pero hay que tener en cuenta que en mis letras he abarcado cantidad de temas muy diferentes.

Pregunta 4: Un año después de aquel encuentro fugaz con el Joe Arroyo, Neurosis visitaría la capital del Caquetá, en uno de los episodios de guerra más difíciles que ha vivido ese departamento. Revista Espektra es un medio que nace en colaboración entre un equipo multidisciplinario del Eje Cafetero, Caquetá y Antioquia. Nuestros colegas del Caquetá recuerdan con gran nostalgia aquel concierto de Rock al Aire.

¿Qué significó para Neurosis tocar clásicos de Verdún, Más allá de la demencia o Karma en lo que por aquel entonces era el corazón del conflicto armado colombiano?

Respuesta 4: Fue una muy buena experiencia, sinceramente no pensé que había tanto público rockero/metalero en Florencia y el apoyo fue muy grande por parte de todos. Con Neurosis me he preocupado de ir a lugares poco comunes o con poca tradición en el metal, por ejemplo La Plata (Huila), hemos viajado mucho, ya vamos llegando a los casi 120 shows por fuera de Bogotá, creo que tenemos una responsabilidad de sembrar la semilla del metal en las nuevas generaciones y esto no se hace a través de redes sociales, esto se hace cara a cara tocando para la gente porque esa es la verdadera experiencia que una persona puede llevar en su recuerdo, no simplemente ver un video por internet, jamás será lo mismo. He hecho sacrificios adaptando el presupuesto económico de la banda a estas locaciones donde el presupuesto es limitado, no se trata solamente de dinero, se trata también de dejar un legado y por eso también he tenido problemas con integrantes dentro de la banda, a algunos solamente les ha importado el dinero mientras que yo pienso en otras cosas también.

Pregunta 5: Lo que nos lleva a la siguiente pregunta: ¿crees que el metal puede contribuir a la construcción de paz en escenarios degradados por la guerra?


Respuesta 5: Se supone que el arte en general debe ser un aporte a la sociedad, pero de ahí a que “siembre paz” no creo. Muchas veces el mismo metalero es agresivo, criticón y carente de valores, dista mucho de ser un ejemplo, esto se ve mucho en redes sociales así que si el ejemplo empieza en casa estamos lejos de tener cultura en el metal. A veces veo los nombres de los eventos como algo que suena bonito para atraer público, pero en la realidad de la vida a casi nadie le importa el motivo del evento, quizás los eventos que son por una causa directa si tengan importancia para el público como recolección de alimentos para animales, pero en general no creo que el nombre de un evento cambie la forma de pensar de alguien que asiste. Son muy pocas las personas que pasan de la pasividad a la acción, la mayoría de la gente cree que publicando cosas bonitas en redes sociales son aportes a la humanidad, pero si no se pasa a la acción en la vida real entonces no hay ningún impacto real y tangible.

Pregunta 6: Este año se cumplen 30 años de Verdún. Hemos hablado mucho de guerra; el metal difícilmente podría entenderse sin las manifestaciones más oscuras del ser humano, como la violencia, el conflicto y la tragedia. Sin embargo, hoy nos encontramos en Pereira en un festival titulado Convivencia Eje Rock.

¿Crees que la pregunta por la convivencia es pertinente para nosotros los metaleros?

Respuesta 6: Yo creo que sí, se vivió la convivencia de los géneros musicales y también fue una buena oportunidad para crear y fortalecer las amistades a través de la música en un espacio pacífico donde todos disfrutaron de sus bandas preferidas. El festival estuvo brutal, la organización, el trato hacia las bandas, la producción, para nosotros fue algo inolvidable. Estamos muy agradecidos con la organización por habernos tenido en cuenta y con todo el público que asistió a nuestro show. Inolvidable.

Pregunta 7: En las obras de Neurosis vemos usualmente manifestaciones de arte universal: la portada de Karma con El grito de Munch; al interior del CD de Verdún nos encontramos con el Guernica de Picasso; o en el intro de “El lamento” podemos escuchar a Mozart bajo la batuta de Vladislav Tchernomushenko, conduciendo al Coro de Leningrado Mihail Glinka y a la Orquesta Ljubljana de Yugoslavia.

¿Cómo han aportado otras manifestaciones de arte a la música de Neurosis?

Respuesta 7: Cualquier manifestación de arte puede ser tenida en cuenta por alguien que crea música, en el caso de la intro “El Lamento” de Mozart no fue algo forzado, era algo que cazaba perfectamente antes de “El Paso del Tiempo No Cura”, ese segmento lo escuché gracias a que mi padre tenía el CD y yo solía ponerme a analizar toda la música que él tenía. Escuchaba con detenimiento de joven sus discos, algunos de ellos de música clásica. Mi padre ya falleció pero yo aún conservo el CD de donde se sacó la intro que pueden escuchar en el disco. El cuadro del grito de Munch era algo que también cazaba a la perfección con el título del disco “Karma”, la desesperación es evidente, es como si el autor hubiera retratado el sufrimiento amargo de la existencia humana.

Pregunta: 8 En Facebook es usual ver cómo «atiendes» a uno tras otro en partidas Blitz de ajedrez. Este deporte plantea, desde las matemáticas, pensar muy bien el movimiento siguiente, tanto propio como del contrincante.

Después de cuatro décadas en el mundo del metal, ¿encuentras alguna relación entre el ajedrez y el metal?

Respuesta 8: El ajedrez desarrolla muchas capacidades mentales, lo juego desde que tenía 5 años. En 1989 le gané una partida al primer Gran Maestro colombiano Alonso Zapata y cuando vivía en España gané un campeonato local. Dejé de jugar muchos años por dedicarme a la música y lo volví a retomar hace unos 9 años. Hay mucha relación entre el ajedrez y la música, hasta se ha demostrado en estudios que han hecho universidades, por ejemplo, la creatividad que requieren ambos ámbitos, el ajedrez no es solo calcular movimientos adelante, hay que crear por encima de todo y en eso la imaginación juega un papel muy importante, esto es lo mismo que cuando vas a crear una canción, surgen las mismas preguntas: ¿y si hago esto qué pasa?  De igual manera hay muchas situaciones en la vida real en las que las veo como una partida de ajedrez, por ejemplo, ser el manager de la banda para un concierto requiere de encargarse de múltiples tareas al mismo tiempo al igual que en una partida de ajedrez donde debes tener en cuenta la posición de absolutamente todas las piezas en el tablero.

Pregunta 9: Por último, Jorge, ¿qué pregunta te gustaría responder que nunca te hayan hecho antes en una entrevista?

Respuesta 9: Siempre he estado abierto a todas las preguntas que me quieran hacer sin ningún problema, las personas suelen asumir cosas sobre uno por un pequeño detalle y te juzgan por eso sin conocer absolutamente nada de uno, si a esto le sumamos que la gente suele ser perezosa para leer pues imagínate tú como la verdad puede ser distorsionada de maneras inimaginables. Siempre estaré dispuesto a responder todas las preguntas que me quieran hacer, todas son válidas.

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